Desde el 20 hasta el 24 de julio, Montenegro celebra con orgullo la Décima edición del Concurso Municipal del Cuento “Montenegro es mi Cuento”, un evento que rebosa creatividad, comunidad y esperanza.
Historias que nacen en cada corazón
Imagina este «Emporio Cafetero» latiendo con las voces de quienes encontraron en la palabra una forma de ser escuchados. En esta edición no solo los estudiantes participaron: adultos, docentes y jóvenes concursaron con sus relatos, convertidos en mensajeros de sus sueños y memorias.
Fueron 219 cuentos inscritos, un verdadero testimonio de que en cada casa hay un narrador que espera ser descubierto
Talleres que despiertan imaginación
Detrás de cada texto hay talleres, charlas, acompañamiento: el sólido respaldo del proyecto “La Palabra, la Lectura y la Escritura” llevó a barrios y veredas el impulso necesario para escribir la voz propia. Grandes y chicos fortalecieron su confianza y desplegaron su ingenio con el calor de la comunidad.
Más que premios, celebraciones
No se trata solo de premios (bonos de Unicentro, entradas al Parque del Café, cine y rifas para toda la familia), sino de valorar el talento local y fomentar el gusto por contar historias desde el corazón.
Un encuentro en el Teatro Esmeralda
El jueves 24 de julio a las 2 p.m., en el Teatro Esmeralda, resonarán los aplausos y las emociones al escuchar a los ganadores, honrados frente a su gente en un momento gratuito, lleno de orgullo y pertenencia.
En Montenegro, cada historia cuenta, sin importar la edad: niños, adolescentes, adultos y docentes se animaron a compartir sus mundos. Desde cuentos con dragones hasta memorias familiares, cada palabra tejió el tapiz de nuestra comunidad.
Participar fue más que escribir: fue recuperar nuestra voz, reconocernos en nuestros relatos y celebrar ese poder de expresarnos. Fue descubrir que en casa, en la escuela o en la vereda hay talento para inspirar, sorprender y emocionarnos.
Si estuviste en esos talleres o conoces a alguien que participó, sabes cómo un lápiz —o un teclado— puede encender chispa dentro de nosotros. Y si aún no compartiste tu cuento, este es un llamado para el próximo año: Montenegro te espera para contarte en sus páginas.
