El cementerio Libre de Montenegro fue creado por el Concejo Municipal como cementerio laico mediante el acuerdo 020 de 1924, para facilitar el entierro digno de ciudadanos que no eran recibidos en los cementerios católicos a causa de sus creencias diversas. Con dicho Acuerdo el Concejo Municipal aprobó la compra del lote con destino a la construcción del cementerio laico. Finalmente fue construido en 1934 bajo diseño del ingeniero alemán Antonio Schieferl. Hoy solo quedan la fachada y los vestigios de un cementerio hecho para los que tenían creencias diferentes.